domingo, 7 de febrero de 2010

Trek Demo y pequeña prueba

Esta mañana tuve la suerte de acudir a un Test Demo que ha celebrado Trek en Málaga, donde se han visto bicicletas increibles, de precios astronómicos, pero las cuales hemos tenido la suerte de poder probar en condiciones. El evento era organizado de la mano de la nueva tienda Trek en Málaga, situada en la Cruz de Humilladero, y la salida a tan especial celebración era junto al Jardín Botánico de la Concepción. Me dejaron una Trek Madone 9.6, una máquina montada en Dura-Ace, con ruedas Bontrager Lite XXX Race, en fibra de carbono, y perfil bajo, y desarrollos compact. Vamos que para mí estamos hablando de la bici ideal en este momento, y encima da un peso de 6.3 kilos, impresionante!!! (sobre todo por los 7500 euros que cuesta el bicho)


Salimos desde el citado lugar, rumbo hacia Almogía, donde el amigo Juanma, conocido como Hechicero, en ciertos foros ciclistas, se encargó de poner un ritmo muy vivo que a mas de uno, en frío y por la mañana como que le estaba viniendo algo largo. Por mi parte pues bueno, último día del tercer microciclo de entrenamiento, con salidas a 158 pulsaciones de máxima, y no menos de 145, y algún que otro intervalo de fuerza, y algo acongojado por el nivel que pudieran tener los demás y lo que me harían sufrir. Los repechos que hay antes de comenzar la subida ya empezaban a notarse en las patas y en los pulmones, por lo menos a mí, y el pulso ya empezaba a ponerse a mas de 170 pulsaciones. Llegamos al famoso puente de hierro que marca el inicio del puerto, y no tardaron en empezar a descolgarse ciclistas de los que nutrían la expedición "Trekiana". Subimos a un ritmo muy vivo, y por mi parte y los que iban delante mía, no quitamos el plato grande en toda la subida. Sufrí de lo lindo, pero me sentía con fuerza, a pesar de que el pecho empezaba a quemarme, y el sabor a sangre comenzaba a invadir mi paladar, debido al esfuerzo al cual no estoy aún acostumbrado.

Coronamos Almogía, y esperamos al resto de integrantes. En la subida la bici se comportó de lujo, impresionante, como no podía ser menos en una máquina de este calibre digna del propio Alberto Contador. Responde a las mil maravillas, ya sea de pie, sentado, bajando, atacando, o en cualquiera de sus usos y modalidades. Muy cómoda, absorbe los baches de una manera increíble, y demuestra una rigidez indiscutible.
Bajada hacia las carretera de Villanueva, dirección Málaga, y a sufrir en cada repecho, que los hay hasta del 11% en ese tramo, y bueno, pulsaciones cada vez más altas, pero con la sensación de que dentro de lo malo, mi forma no está perdida en un agujero negro como pensaba estos días atrás, y es que se ve que correr este invierno a pie, si que me ha servido de algo.
A seguir sufriendo y machacándome a todo lo que podía hasta llegar a Puerto de la Torre, donde nos reagrupamos, y ya fuimos hasta el punto de salida, guerreando un poco más por el camino, y es que estas bicis te invitan a saltar una y otra vez del grupo.

Al final han sido pocos kilómetros, solo sesenta, pero a un ritmo y con unas subidas que han hecho que terminemos la ruta bastante satisfechos, por lo menos por mi parte, ya que aunque he sufrido mucho (190 pulsaciones de máxima) para poder mantener un ritmo vivo me he notado que puedo volver, aunque muy a lo lejos aun, a coger una forma digna de poder aguantar bien en las carreras.

Hasta pronto.

1 comentario:

  1. El habito no hace al monje.....JJEJEJEJJE

    O en nuestro caso, LA BICI NO HACE AL CICLISTA...

    Entrena maquina, que falta nos va hacer....

    Pa otra ocasión habisame de estos eventos..... Me hubiera animado a acompañarte, aunque fuera un poco paria en mi SCOTT, JEJEJEJEJE

    ResponderEliminar